Cómo arreglar un grifo que gotea:
Uno de los problemas de fontanería más comunes se dan en la grifería. Es muy común que algún grifo del hogar no cierre correctamente. Hoy, desde Tubo-plástica te enseñamos a reparar un grifo que gotear en 7 sencillos pasos. Esta reparación es válida ya sea un grifo termostático o monomando.
Hay que remarcar, que sin tener ninguna noción de fontanería, puede ser una reparación algo complicada. Por ello, te aconsejamos siempre que confíes en los expertos. Desde Tubo-plástica te ayudamos con cualquier siniestro de fontanería.
No obstante, a continuación te damos todas la claves para que puedas realizar la reparación del grifo tú mismo.
Para arreglar el grifo que gotea monomando o termostático, prepara las siguientes herramientas:
- Llave inglesa.
- Tapón o para el drenaje.
- Destornillador.
- Arandelas para sustituir las desgastadas.
Cómo reparar un grifo que pierde agua en 7 pasos
1º Cerrar el agua
Es un paso muy importante, así que asegúrate de hacerlo de manera correcta para reparar correctamente el problema. Lo primero que tienes que hacer es cerrar las llaves del paso del agua. Si no, será imposible trabajar ya que vamos a tener que retirar parte de la grifería y manipular los conductos por donde corre el agua.
Por tanto, para evitar averías mayores, cierra las llaves de paso del agua.
Estas se suelen encontrar bajo el fregadero o lavabo. Busca las tuberías que suben hacia arriba y localiza una manija que se puede mover. Para cerrarla, gírala en el sentido de las agujas del reloj.
2º Taponar el drenaje
Es un sencillo paso, pero que te puede evitar muchos problemas durante la reparación del grifo. Tapona el drenaje con un tapón, o si no es posible, coloca algún trapo o toalla que impida que caiga cualquier elemento a las tuberías.
Al realizar la reparación, vamos a manipular tornillos, arandelas o pequeñas piezas que podemos perder a través de los conductos de agua, por ello, evítalo con este sencillo paso.
3º Determinar el tipo de grifo
Para reparar de forma correcta un grifo, deberás de terminar de qué tipo es antes de comenzar a desmontarlo:
- Compresión: es el más sencillo de reconocer. Lo sabrás si tiene don manijas, una de agua
caliente y otra para la fría. - De bola, este tipo de grifo solo contiene un rodamiento.
- Cartucho: los cuales pueden ser de diferentes materiales, pero la manija suele llevar embellecedor.
- Discos de cerámica: son los que tienen un cilindro de este material en su interior.
Ya que en los hogares, el grifo más común es el de compresión, hoy nos vamos a centrar en la reparación del mismo.
4º Retirar manijas
Un paso sencillo, en ocasiones, hay que retirar los elementos decorativos. Con un destornillador será muy sencillo quitar tanto las manijas como esos elementos de tu grifo.
5º Quitar la tuerca
Una vez hayas retirado las manijas del grifo, verás la parte superior de la junta tórica. Esta junta se encuentra sobre una arandela, llamada arandela de asiento. Podrás quitar la tuerca usando una llave inglesa.
Aquí es donde podemos encontrar uno de los síntomas de un grifo que gotea. Con el paso del tiempo estas arandelas de goma se desgastan, haciendo que el grifo pierda agua.
6º Retirar y sustituir la arandela
Al extraer la junta, podrás ver más fácilmente donde se encuentra la arandela, retírala y sustitúyela por otra igual. Las puedes encontrar en ferreterías. En el caso, de que sea alguna manija la que gotea y no el grifo, deberás sustituir la junta tórica completa.
7º Vuelve a colocar el grifo
Coloca de nuevo paso a paso todos los elementos, asegurando bien todos los tornillos y tuercas.
Ahora ya sabes como arreglar un grifo que no cierra bien y gotea, siguiendo estos sencillos pasos, tu grifo debería estar reparado. Si la instalación todavía gotea, contacta con un especialista. Contacta con Tubo- Plástica, somos expertos en soluciones de siniestros, reparamos cualquier avería de fontanería. Pide información y presupuesto sin compromiso.
